Hondureños por la Democracia, organización de base con sede en Washington, DC se expresó esta mañana después de las declaraciones en las que Arturo Valenzuela, Vicesecretario de Estado de EEUU para América Latina, reconociera la victoria de Porfirio Lobo como ganador de los comicios llevados a cabo en Honduras y cuyos resultados serán desconocidos por la mayoría de países de Latinoamérica, organismos internacionales como el Grupo de Rio, la Organización de Estados Americanos y las Naciones Unidas, así como entes de la sociedad civil de EEUU y la mayoría del pueblo hondureño debido a la atmosfera de intimidación y temor en la cual se realizaron dichas elecciones.
Mario Ramos, vocero de Hondureños por la Democracia, expreso su indignación que EEUU reconozca como legítimas las elecciones llevadas a cabo prácticamente con las armas apuntadas en contra del pueblo hondureño. “La democracia no se impone, se gana, dijo el Señor Ramos.
Hondureños por la Democracia junto a organizaciones de base en Honduras, organismos de Derechos Humanos y medios independientes internacionales, han reportado un creciente número de actos represivos e irregularidades que llevan a la irrevocable conclusión que las elecciones hondureñas no fueron “libres y justas” así como el Departamento de Estados de EEUU pretende hacer creer al pueblo americano y a las naciones hermanas del hemisferio.
Entre los actos represivos más visibles se reportan:
* Un mes previo a las elecciones Las Fuerzas Armadas de Honduras enviaron un memorándum a los alcaldes de los 298 municipios del territorio hondureño en el cual solicitaban un listado de los miembros locales del amplio movimiento social autodenominado Frente Nacional en contra del Golpe de Estado comprendido por sindicatos de trabajadores, asociaciones de maestros, artistas, intelectuales, así como de grupos de feministas, campesinos, pueblos indígenas, y afro-hondureños.
* El día previo a las elecciones miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional allanaron sin orden legal alguna las oficinas de una cooperativa de 42 organizaciones de campesinos y de mujeres localizada en Siguatepeque en el centro del país. Los entes represivos se llevaron computadoras que contienen datos privados de los empleados como ser nombres, número de cédula, número de placas vehiculares y direcciones de sus hogares.
* El día domingo 29 de noviembre (día de las ilegitimas elecciones) durante los comicios una multitud de 500 personas manifestándose pacíficamente en la ciudad de San Pedro Sula, fueron violentamente dispersos por fuerzas militares y policiales causando heridos, detenidos, y una persona desaparecida.
Hondureños por La Democracia y otros entes de la sociedad civil de EEUU con las que ha establecido relaciones estrechas bajo el marco del golpe de estado del 28 de junio y las elecciones fraudulentas del 29 de noviembre, aseguran que el reconocimiento de los comicios por parte de EEUU no conllevará a la paz. “Existen divisiones muy profundas en el país que el endoso de las elecciones por parte de EEUU no podrá resolver” dijo el Señor Ramos.
“Es necesario que si van a insistir en actuar unilateralmente, los EEUU condicionen el reconocimiento de las elecciones a que se garantice la seguridad personal y el paro de hostigamiento al presidente democráticamente electo Manuel Zelaya Rosales y las personas que se encuentran en la embajada de Brasil en Honduras, que se disuelvan por completo los ataques políticos hacia el Presidente Zelaya disfrazados de falsos cargos en su contra y que se detenga las persecuciones a ex funcionarios de su gobierno,
la investigación y enjuiciamiento a los responsables de violaciones a los derechos humanos y el apoyo incondicional del gobierno de EEUU para asegurarse que el Congreso Nacional de Honduras proceda a autorizar una asamblea nacional constituyente representativa de la sociedad multicultural y altamente variada que es Honduras”, agregó el Señor Ramos.
Mario Ramos Sergio Moncada
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