Cada domingo un grupo de menores trabajadoras de empresas agro-exportadoras de cinco municipios de Chimaltenango, Guatemala, se reúnen en un espacio de confianza para recrearse y aprender, en un ambiente familiar donde se sienten cómodas y protegidas.
Este es un esfuerzo del Centro de Estudios y Apoyo para el Desarrollo Local (CEADEL), que promueve y defiende los derechos humanos y laborales de las menores trabajadoras en empresas de productos no tradicionales en Guatemala.
Estas niñas no deberían estar trabajando para el sostén familiar, sino en la escuela formándose para el futuro. Lamentablemente la mayoría de los niños se insertan al campo laboral a temprana edad debido a la situación económica en Guatemala. Los niños que trabajan son huérfanos, provienen de hogares desintegrados, son hijos de madres solteras o son hijas de padres irresponsables.
Ellas están consientes que en sus trabajos hay muchos peligros, que son abusados o explotados por los mandos medios o patronos y que les violan sus derechos humanos y laborales.
El trabajo que hacen los menores es picado de brócoli, despunte de arbeja, corte de flores, empaque de flores, frutas y verduras. En cada una de estas actividades las metas son muy elevadas como realizar 80 canastas de despunte de arbeja de 28 libras cada una al día, llevar 50 docenas de flores del invernadero a la sala de clasificación.
Una niña de quince años, trabajadora de Alimentos San Son ubicada en jurisdicción de El Tejar, Chimaltenango, dice que les asignan hacer tres baños de un quintal cada uno de partir habas para luego ingresarlas al horno; la gravedad del asunto es que ellas tienen que levantar estos baños para trasladarlos de un lado a otro.
Consideran que los horarios son muy extensos, el trabajo no esta acorde a su edad y que estas actividades dañan su crecimiento normal. En algunas empresas no les dan la hora de almuerzo.
Pero dicen sentirse bien trabajando porque contribuyen a la economía de su hogar y para que sus hermanos estudien, sin embargo hay días en que no tienen deseos de ir a trabajar.
Algunas menores trabajadoras desean estudiar los fines de semana y trabajar durante los días laborales para costear sus estudios. Les gustaría ser enfermeras, maestras, secretarias o recibir algún curso técnico como belleza, cocina o repostería. Preferirían trabajar en una oficina, clínica o poner su propio negocio, para tener ellas y su familia un mejor nivel de vida y no seguir siendo esclavas y sumisas de los empresarios.
Enfermedades de las niñas y niños en agro exportadoras
Enfermedades gastrointestinales entre las más comunes esta la gastritis.
Dolor de cabeza por los pesticidas.
Dolor de piernas por permanecer todo el día de pie.
Dolor de brazos cuando cargan bultos muy pesados.
Dolor de pulmones por la posición que mantienen todo el día.
Dolor de cintura.
Enfermedades bronquiales como infecciones en la garganta, bronquitis y bronconeumonía por trabajar en cuartos fríos.
Riesgos: – Riesgos físicos: Heridas, fracturas, intoxicaciones, asfixias, quemaduras, enfermedades de la piel, enfermedades de las vías respiratorias, enfermedades oculares. – Violaciones, acoso y abuso sexual – Disminución o pérdida de su autoestima