La militarización de la universidad es producto de la incapacidad de la rectora de la UNAH para resolver los conflictos labores, y ahora ha recurrido a la utilización de los órganos represores del Estado para intimidar la lucha estudiantil y la del Sitraunah, que desde hace más de 60 días mantiene una huelga de hambre en reclamo del reintegro de más de un centenar de empleados despedidos.
En su intento por recuperar la autonomía universitaria, los estudiantes fueron víctimas de la brutalidad policial, que utilizando toletes, gas lacrimógeno, chorros de agua con gas pimienta y balas de goma, entraron al predio universitario a reprimir a los manifestantes.
Durante la represión, un estudiante fue salvajemente golpeado, otro fue capturado y llevado a la posta policial, mientras varios sufrieron desmayos y vomitos, por los efectos de los gases lanzados por la policía.
German Reyes
03 de agosto
Hora: 5:44 pm