Unas 65 mil personas fueron expuestas al químico DBCP, conocido comercialmente como Nemagón o Fumazone, en más de 15 países en el mundo. Ese veneno usado en las plantaciones de las transnacionales bananeras causo severos daños en la salud de la gente y considerable contaminación de agua, tierra, aire en las zonas donde fue aplicada.
Además del banano también fue usado en menor medida en cítricos, viñedos, cultivos de piñas, duraznos, soya y tomate. Para el año 1975 unas 25 millones de libras se producían en EU cada año. Israel era el otro país productor.
En Honduras unos 8 mil trabajadores estuvieron en contacto directo con el químico, pero otra cantidad mayor de personas por diversas vías recibió sus perjuicios.
Desde que comenzaron a aplicar el Nemagón en a finales de los 60 en la zonas del valle del Aguán, la transnacional Dole, que operaba con el nombre de Standard, sabía perfectamente los daños que causaba al inhalarlo o absorberlo por la piel. Pero los trabajadores aseguran que nadie les advirtió del peligro, ni les dotaron de algún equipo que evitara la inhalación o la absorción por la piel.
Sabían el atentado que cometían
En efecto, los fabricantes del veneno en Estados Unidos, Dow Chemical Company y Shell Chemical Company, comprobaron en los laboratorios lo peligroso del producto. Por eso hicieron una serie de recomendaciones para aminorar el riesgo, pero Jack DeMent, encargado mundial de la Standard para la erradicación de las pestes, comunicó a los gerentes de plantaciones que “esto no es operacionalmente realizable y no necesita implementarse”.
En 1961 la Shell manipuló investigaciones para conseguir la aprobación de etiquetas de advertencia por la FDA sin establecer muchos señalamientos de riesgos que podrían bajarle la venta del producto. Las advertencias en las etiquetas se redujeron a “No respirar los vapores” y “use solo en áreas bien ventiladas” y “Evitar respiración prolongada”.
Por varios años antes de que se lograra vincular este producto con fenómenos de esterilidad, jóvenes en Israel y California que laboraban con el químico observaron que dentro de ellos la capacidad de procreación estaba disminuida, lo cual trajo como consecuencia la investigación y el descubrimiento de la acción nociva del DBCP.
La Standard influenció a las secretarías de salud de los países donde tenía sus plantaciones y evitó toda información pública sobre los daños que el químico causaba.
Como llegó a la gente
El Nemagón se aplicaba a través de los sistemas de riego conocidos en los campos bananeros como mariposas. Consistía en un tubo más alto que las matas de banano por el cual salía un fuerte chorro de agua que giraba para regar más de 20 metros alrededor. El veneno iba mezclado con el agua.
De esa manera todo aquel que se hallaba en el área estuvo expuesto al veneno al estar directamente bajo esa lluvia de la muerte o estar inhalando durante horas sus vapores atrapados bajo el gran techo vegetal formado por las grandes hojas de los bananales.
Los trabajadores absorbían tanto el producto que sus orines olían a nemagón.
Muchas otras personas, que no eran directamente trabajadores, recibieron esa lluvia y vapores, como quienes transitaban por las proximidades de la zona de aplicación o las mujeres y los niños que era costumbre que llevaran el almuerzo a los obreros hasta su puesto de trabajo.
Además, Las personas de las comunidades vecinas a las plantaciones usaban el agua de canales donde caía el veneno cuando lo regaban.
Otra forma de aplicar el veneno fue mediante una especie de jeringa gigante que se llenaba con químico, luego se enterraba la punta cerca de la base de la mata de banano y se disparaba al apretar una manivela. El riesgo estaba al momento de cargar los inyectores o cuando el veneno rebotaba en piedras u otros objetos.
También se corría gran riesgo cuando manipulaban los barriles o drones y se salpicaban o provocaban derrames. Muchos de esos barriles donde venía el Nemagón fueron usados después para almacenar agua en las viviendas de trabajadores y particulares o como basureros en los campamentos bananeros y las escuelas.
Los que estaban en contacto directo eran los bodegueros, trasegadores, mezcladores, mensajeros, apoyadores, chapeadores, regadores y capitánes de cuadrilla.
Los estragos del Nemagón
Debido a su volatilidad y persistencia, el Nemagón provocó lesiones de diverso tipo en los trabajadores. Los daños a las personas han sido comprobados por médicos y laboratorios en varios países, incluyendo los Estados Unidos, y por la Organización Mundial de la Salud.
Según la microbióloga Ana Ramírez, de Costa Rica, que ha estudiado los efectos en seres humanos, el DBCP es una sustancia altamente reactiva que choca contra las moléculas de ADN y puede ocasionar mutaciones genéticas. Cuando esas alteraciones se producen en células sexuales, se manifiestan daños reproductivos o esterilidad, cuando ocurren en otras células, pueden desatar cáncer.
En Nicaragua se consideran unos 900 los fallecidos afectados por el pesticida. Un estudio reciente demostró que en Chinandega, la zona de mayor contaminación, la incidencia de cáncer de útero es del 31 por ciento, cuando en el resto de la población esta cifra llega apenas al 1 por ciento.
En Honduras, un ejemplo es Alfonso Závala Rodríguez a quien le amputaron su pene en 1982 debido al cáncer que padecía. Desde 1975 la agencia Americana de Protección Ambiental determinó que el DBCP era carcinógeno.
Según diversos estudios, la exposición al Nemagón y Fumazone ha provocado dolencias en el hígado y las articulaciones, reducción de peso, pérdida del cabello y manchas en la piel. En las mujeres ha generado abortos frecuentes, cáncer de útero y mamas.
“Tengo ardor y dolor en el estómago desde que cargaba guineos”; “estas manchas me duelen, me pican, no me dejan dormir”; “padezco de ceguera, dolor en la canilla, insomnio”; “tengo deficiencia de todo tipo, deficiencia sexual”, “un dolor que es como si todos los huesos se quebraran”, se quejan los y las afectadas.
Las enfermedades provocadas por DBCP
Esterilidad- Los trabajadores han resultado con:
Azoospermia = sus células no producen esperma.
oligospermia = producen una cantidad de esperma inferior a lo normal.
Teratospermia = haya suficiente esperma, pero los espermatozoides se mueven muy lento y no alcanzan a fertilizar.
En todos los casos es casi imposible que los hombres puedan engendrar hijos.
Cáncer
Estomacal, a los riñones, al duodeno, esófago, hígado, pecho, a los testículos y leucemia linfoide. El Instituto Nacional contra el Cáncer de Estados Unidos cita al DBCP como “una de las causas de cáncer más poderosas”.
Defectos de nacimiento
El Nemagón se ha ligado a una cantidad de defectos de nacimiento y también se sabe que causa abortos en las mujeres expuestas.
DAÑOS AL AMBIENTE
Nemagón es un pesticida altamente persistente y móvil y se puede filtrar en algunos terrenos. Contamina el agua y la tierra de superficie. También ha sido clasificado como un contaminador del aire, aunque en menor medida.
En Estados Unidos, en 1999 la ciudad de Fresno, California, mediante un juicio obligó a las empresas fabricantes del DBCP, Dow Chemical, Shell Oil Company y Occidental Corporation, a pagar en efectivo 21 millones de dólares. La demanda de la ciudad obedecía a la contaminación de aguas subterráneas producida por el DBCP. El total de la transacción pactada es de 100 millones de dólares para hacer trabajos de purificación de las aguas hasta el año 2035.
Aunque la Stándard lo niega, los trabajadores en Honduras aseguran que cerca de la ciudad de Olanchito, departamento de Yoro, hay un sitio donde fueron enterrados muchos barriles con Nemagón que aún estarían causando contaminación. La Dole nunca ha realizado en esta región alguna medida para reparar los daños posibles al ambiente.
Asimismo, el Nemagón, que permanece en la tierra entre 80 y 200 años, se filtró hasta los pozos de agua de los cuales se abastecía la población cercana, provocando que las mujeres que consumían esa agua luego contaminaran a sus hijos pequeños por medio de la leche materna, lo cual multiplica por miles las personas dañadas.
LOS RESPONSABLES
El pesticida era producido por Dow Chemical, Occidental Chemical Company, Shell y Dead Sea Bromine de Israel entre otras empresas.
Las transnacionales fruteras que aplicaron el producto en las plantaciones fueron: Del Monte Corporation International, Standard Fruit Company, Dole Limited Company y la United Fruit o Chiquita Brands Internacional.
Cuanto se reclama de indemnización
Los afiliados de Asextbanh demandan una indemnización de 300 mil dólares por demandante, 346 millones en total, lo cual ha sido establecido tomando como referente los pagos a personas que también fueron afectadas por el Nemagón y que fueron indemnizadas en los Estados Unidos.
En el conocido como caso Pérez, una pareja y su hijo, donde el esposo quedó azoospérmico, fueron indemnizados con dos millones 300 mil dólares.
En el caso de Jones y de Sarris se compensó con más de un millón de dólares por familia. Y en el caso de derrame de un barril de Nemagón en Panamá City, Florida, la indemnización fue de seis millones de dólares.
Según valoraciones de entendidos el montó de 300 mil dólares es aún muy conservador y debería ser mayor la indemnización, y aun así no lograrían reparar los daños en las vidas de los trabajadores, quienes no por ser de un país pobre como Honduras valen menos que la de los obreros estadounidenses afectados.
Por su parte el Movimiento Nemagón ha establecido la cuantía en un monto no menor de 195 mil dólares por cada demandante, haciendo una suma total de 137 millones 280 mil dólares.
Las indemnizaciones de mentira
Años atrás la empresa ofreció indemnizaciones clasificando a los afectados en tres categorías: A (oligospérmicos) 110 mil lempiras; B (Azoospérmicos) 45 mil y C 30 mil lempiras. A quienes no salieran afectados les darían 100 dólares.
Precisamente se sabe que 13,14 y 15 de septiembre de 1997 se distribuyeron 230 mil dólares entre 2 mil 300 personas, pagados en el Banco Corporativo de La Ceiba.
Quedó pendiente el pago para los que resultaron enfermos. Se dice que la transnacional asignó 40 millones de dólares para pagar, si eso es cierto, quién sabe que pasó con ese dinero porque los pagos nunca se hicieron.
En el 2002 el ministro del Trabajo, Germán Leitzelar se prestó para promover indemnizaciones que ofrecía la Standard de entre 3 mil a 8 mil dólares a cambio de que los obreros retiraran demandas presentadas en Estados Unidos. Fue creada una comisión para viajar a Washington integrada por el viceministro de Trabajo Angel Escobar, el presidente del Sindicato de Standard Carlos López y el presidente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Nacionales, Mauro González. Las indemnizaciones nunca llegaron.