La secretaria de Estado, Hillary Clinton todavía tiene que tomar una decisión al respecto. Las leyes estadounidenses prohíben la asistencia del gobierno a cualquier país cuyo presidente democráticamente electo sea derrocado por un golpe militar o por decreto.
Mientras tanto, el secretario general de la Organización de Estados Americanos rechazó una propuesta del régimen de facto que permitiría a Zelaya retornar a Honduras. Según el plan, el presidente de facto de Honduras, Roberto Michelletti ofreció la posibilidad de renunciar y aceptar a Zelaya de nuevo en el país, siempre y cuando el mandatario democráticamente electo renuncie a reclamar su derecho a ocupar la presidencia.
Comun-Noticias
Sábado 29 agosto 2009