Las promesas de Gobierno de los últimos años han ido encaminadas a la reducción de la pobreza extrema que enfrenta el país. A la fecha se han derogado unos 6,500 millones de dolares y los resultados no han sido los esperados . Las metas están encaminadas a lograr una Honduras
diferente parea el año 2015, con menos pobreza y con un desarrollo económico sostenible que permita mermar el endeudamiento externo.
Sin embargo casi a mediados del 2008, cuando el gobierno hondureño está a más de la mitad del plazo que se estableció para llegar a la meta del 2015, al analizar cuánto y cómo se invierten los fondos de la ERP en realidad, los resultados no son nada esperanzadores.