Según el informe presentado por la Asociación Campesina Nacional (Acan), el “clientelismo político, el amiguismo y el familiarismo” son los ejes predominantes en la utilización de los fondos de la Estrategia de Reducción de la Pobreza (ERP) por parte de la mayoría de alcaldes.
El documento, denominado “Vigilancia y auditoría social campesina a la Estrategia de Reducción de la Pobreza”, fue presentado a la prensa en una reunión con el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA). La investigación campesina reflejó que, “los alcaldes no manejan el desarrollo productivo ni la organización empresarial, no están conscientes que los fondos para la producción no se pueden manejar como subsidios o ayudas o los entreguen para complacer el clientelismo político o los utilicen en la próxima campaña política para entregarlos como piñatas o pelotas , se requiere de un compromiso permanente”.