La tala ilegal del bosque hondureño reporta pérdidas anuales al Estado por el orden de 70 millones de dólares en forma directa, mientras que las pérdidas indirectas se contabilizan en unos mil 237 millones dólares.
Estas cifras fueron reveladas en el informe de Monitoreo Forestal Independiente (MFI), que recoge datos de mayo 2005 a abril 2006 en varios municipios del departamento de Olancho, donde se reportaron pérdidas de 160 mil metros cúbicos de madera de bosque latifoliado y más de 820 mil metros cúbicos de coníferas.