Guillermo Anderson

El Encarguito
Guillermo Anderson (Honduras)

Ya que escribiste del norte
y te hacen falta muchas cosas
ahí te mando un encarguito
cortesía de Doña Rosa.

Ojalá pasen la aduana
y las compartas con mis tíos
y que al probarlas se olviden
por un ratito del frío.

Te van los nacatamales
te va un chicharrón con yuca
una olla de curiles
tajaditas y montucas.

Te mando un buen chinamito
un atol y seis baleadas
te va un tapado olanchano
y sopa de capirotadas.

Y ojala pasen la aduana
y que no anden con papadas
te mando unos platanitos
y dos libras de cuajada.

Bolsitas con chipilín
y unas hojas de pacaya
te mando una flor de izote
y un chilito que malaya.

Te va una sopa de jute
con ayote y con juniapa
empanadas de loroco
y de chascada un vino e´papa

Y ojala…

Un atol chuco y mistela
pan de yema y pan de rosa
cocadas y colaciones
chiricoyas y melcochas

Dulce de tapa y cachaza
mil confites coloridos
totopostes y semitas
leche de burra y batidos

Y ojala…

te mando un arroz con leche
alborotos y espumillas
una bolsa de alcitrones
tustacas y quesadillas.

Ayote en miel y torrejas
hojuelas y rapadura
panelas y zapotillos
tabletas y mascaduras.

Ama de casa
Guillermo Anderson
(Honduras)

Ella era un ama de casa de un vecindario cualquiera
Y es necesario que yo
Les cuente la historia entera.
Hace ya un tiempo que se sentía malla señora
y decidió irse a examinar a primera hora

Dejo los niños bajo el cuidado de una vecina
Y al centro de la salud se fue a buscar medicina
Ahí sufrio en una de esas largas filas de espera
Y por la tarde logro que al fin alguien la atendiera

Que de esa tristeza florezca lo humano
Contra la ignorancia y unimos como hermanos.
Lo que le dijo el doctor la dejo mas que sorprendida
Tuvo que hacerse la muy mentada prueba del SIDA
Se hizo la prueba y en pocos días el resultado
Le revelaba el horror que nunca había imaginado.
No puede ser le dijo al doctor yo soy muy decente
Y ahí en mi barrio bien me conoce toda la gente.
Yo no 10 dudo contesto el medico entristecido
Pero hábleme un poco sobre la vida de su mando.

Que de esa tristeza…

Alla en un bar de la zona roja estaba un señor
Esposo de la señora que atravesaba el horror
Una mujer se le acerca y la deja que la base
Y por la puerta de atrás se ve que desaparece

Y no se trata de que si andaba o no protegido
La educación es mejor que cualquier preservativo
En ese instante no hubo trabajo, ni hijos, ni esposa
Por eso es que esta historia no tiene final de rosas
Por eso es que esta historia no tiene final de rosas.

Que de esta tristeza…

Un hombre que no pensó en los de su descendencia
Si no tuvo corazón como iba a tener conciencia.

Que de esa tristeza…
Ponerte un preservativo no es de todo una solucion
Esto es cosa de conciencia, es cosa de tu corazon

Que de esa tristeza…

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