Gloria, una Histria real

Gloria vivía en una aldea del departamento de Colón. Siendo Gloria una de las mayores le tocaba cuidar de sus hermanitos menores. Un día Gloria dice que se aburrió de cuidar a sus hermanos y se vino para San Pedro Sula, aquí sola y sin ningún familiar, se dedicó a trabajar.

Siendo una mujer joven, como es natural, a Gloria se le apareció el primer enamorado, al tiempo estaba embarazada de su primer hijo y el padre desapareció. Unos años después quedó embarazada de otro hombre, tuvo gemelos, otra vez el padre no se responsabilizó. Pasó otro tiempo y nuevamente quedó embarazada de su tercer compañero quien también la dejó con otro niño. Finalmente, pasado un tiempo a Gloria le nació una niña también sin padre. En resumen 4 hombres y cinco hijos.

La historia de Gloria es la de miles de mujeres en este país, donde el machismo del hombre se combina con la ignorancia y la irresponsabilidad de la mujer.

Con cinco hijos y sola, Gloria consiguió trabajo en una fábrica, salía de la casa a las 7 de la mañana y regresaba hasta las 7 de la noche. Sus hijos, mientras pudo tener autoridad sobre ellos, iban a la escuela; después hacían lo que querían, no había nadie para supervisar sus actividades, sus amistades, sus actitudes, no había nadie en la casa para ayudarles a hacer sus tareas o escucharles sus inquietudes escolares o simplemente compartir esas pequeñas cosas que pasan a diario en la escuela o en la casa.

Hoy Gloria lamentablemente recoge los frutos de esa nefasta combinación de machismo e irresponsabilidad.

La relación con sus hijos ya crecidos ha sido muy difícil: rebeldía muy fuerte, discusiones y hasta se ha hablado de intento de suicidio por parte de uno de ellos. Su hijo mayor esta en la cárcel considerado un delincuente altamente peligroso involucrado, entre otras muertes, en la de un policía. Uno de sus segundos hijos delinquió por un tiempo y fue parte de una mara y su hija menor se metió con un hombre comprometido, quedó embarazada y ante la imposibilidad de hacerse cargo de ese compromiso abortó al niño.

A los hijos de Gloria se les negó el derecho de tener una familia, llegaban a la casa y no tenían una madre con quien compartir porque esta estaba trabajando para que no les faltara un plato de comida. No tuvieron un padre que les diera seguridad, apoyo, confianza y protección. ¿Qué se podía esperar de todo este desastre?

Lamentablemente la historia no termina aquí, al no conocer el afecto de un padre y el consecuente resentimiento que se debe llevar, el hijo mayor de Gloria esta repitiendo lo mismo que hizo quien lo engendró: hoy tiene tres hijos con tres mujeres distintas y no se ocupa de ninguno. La historia se repite, o peor, se multiplica.

La historia de Gloria es la historia del entorno familiar en Honduras, aunque nos duela admitirlo. No vamos a negar que el panorama es sombrío y nubarroso, lo que no significa que hemos de claudicar. Justamente para la fe cristiana el mundo en sí es un reto.

Cuando el Hijo de Dios llega al mundo, el ambiente en Israel estaba enrarecido, la gente caminaba de un lugar a otro sin alegría, sin esperanza, era como un vivir por vivir, y fue precisamente en este ambiente donde la luz de Dios brilló en el mundo como nunca antes.

La Iglesia esta aquí y ahora para enfrentar los retos que el mundo presenta, desde nuestra fe y esperanza en Jesucristo Resucitado, creemos que la familia querida por Dios sí es posible, comenzando hoy a trabajar en y por ella.


José Antonio Canales

Sacerdote católico, Licenciado en Ciencias Jurídicas y Sociales. Secretario Ejecutivo del Departamento de Familia de la Iglesia Católica de Honduras. Párroco de Nuestra Señora de Suyapa en la Colonia López Arellano, Choloma.

Dejar una respuesta