(Aprobado por el Consejo Permanente el 21 de octubre de 2009)
El Consejo Permanente denuncia y condena enérgicamente las acciones hostiles por parte del régimen de facto contra la Embajada de Brasil en Tegucigalpa y el hostigamiento de sus ocupantes con acciones que los afectan física y psicológicamente y violan sus derechos humanos.
El Consejo Permanente exige al régimen de facto la finalización inmediata de tales acciones, el respeto de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y de los instrumentos internacionales sobre derechos humanos, así como el retiro de todas las fuerzas represivas de los alrededores de la Embajada de Brasil en Tegucigalpa, sin descuidar la debida seguridad de la Misión.
El Consejo Permanente hace un llamamiento a garantizar el derecho a la vida, la integridad y la seguridad del Presidente José Manuel Zelaya Rosales y de todas las personas que se encuentran en la Embajada de Brasil y en sus alrededores, así como a asegurar la protección de su dignidad, e insta a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos a hacer un seguimiento de la situación planteada.
El Consejo Permanente exhorta a proseguir el diálogo ya avanzado en Honduras, dentro de los términos de la propuesta del Acuerdo de San José, sin intentar abrir otros temas diferentes de aquellos contenidos en dicha propuesta.