“Los ciudadanos hondureños tienen el derecho a estar debidamente informados sobre lo que está ocurriendo en el país en este momento tan delicado”, afirmó Carlos Lauría, coordinador del programa de las Américas del Comité, una entidad sin ánimo de lucro que tiene su sede en Nueva York y que defiende la libertad de prensa en el mundo.
“Exhortamos al gobierno interino a descartar las restricciones a la prensa, a reabrir de inmediato los medios suspendidos y a respetar el derecho de los periodistas a informar con total libertad”, afirmó.
Lauría se refirió al cierre hoy del Canal 36 de televisión (Cholusat Sur) y la emisora Radio Globo, únicos medios hondureños que difundían información favorable a Zelaya.
El Gobierno de facto de Micheletti clausuró los dos medios de comunicación e impidió que los seguidores de Zelaya marcharan por Tegucigalpa y otros puntos de Honduras.
“Radio Globo y Canal 36 han sido forzados a salir del aire en varias ocasiones desde que Zealya fue derrocado hace tres meses”, afirmó Lauría.
Destacó que, según una investigación del Comité para la Protección de los Periodistas, “las condiciones de libertad de prensa se han deteriorado desde que Zelaya fue derrocado”.
“Las fuerzas de seguridad hondureñas cerraron estaciones de radio y televisión locales, bloquearon transmisiones de cadenas internacionales de noticias, y detuvieron brevemente a periodistas tras el golpe, según las investigaciones”, indicó.
La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) denunció hoy la suspensión de “las últimas libertades públicas” en Honduras, tras el cierre del Canal 36 y la emisora Radio Globo.