Los índices de personas infectadas por VIH en el país va en aumento y los garífu-nas están inmersos en esa realidad. En sus comunidades cada vez es más frecuente encontrarse con familias afectadas por la desintegración familiar, niños en la orfandad, la lucha por sobrevivir o la muerte de un ser querido.
Con poblaciones culturalmente diferenciadas como la garífuna no es fácil desarrollar estrategias de comunicación orientadas a informar y educar sobre temas como el VIH, infección vinculada a los comportamientos sexuales.
La Alianza para la Comunicación en Salud, AED, con el financiamiento de Agencia Internacional para el Desarrollo, USA/AID, en el año 2005 inició la producción de la primer radionove-la hondurena “Los ancestros no mueren” que en garífuna se traduce “Mouwetiñu Wayunagu”. El productor garífuna Humberto Castillo, informó que en una evaluación de resultados la radionovela llenó las expectativas, dando paso en el 2006 a la grabación de “A orillas del Mar”, en garífuna “Laru Bella”.
CASTING
El Comité de Información, Educación y Comunicación, IEC, preparó grupos teatrales en comunidades garífunas, seleccionando a los más disciplinados para un casting de actores de radio novelas.
Según Castillo, el IEC es un espacio organizativo integrado por representantes de ONG’s garífunas que trabajan en el tema del SIDA en sus comunidades. Su función es de movilizadores y promotores locales. La producción de “Los ancestros no mueren” se realizó con base a estudios realizados en las comunidades de Masca, Travesía, Bajamar y Sara-guaina en el departamento de Cortés; San Juan, Tornaba, La Ensenada, Triunfo de la Cruz, Corozal, Sambo Creck y Nueva Armenia en Atlántida; Santa Fe, Guadalupe, San Antonio, Cristales y Río Negro en Colón. Los resultados reflejaron que los garífunas hablan más el idioma español, por tal razón, la grabación fue bilingüe: 80% español y 20% garífuna. Los más afectados por el VIH son los jóvenes, por lo tanto, los mensajes se dirigían principalmente a los garífunas de 14 a 25 años de edad. El reto era producir un material atractivo para los oyentes, además de informativo y educativo. Se grabó dos temas originales con el cantautor nacional garífuna El Sheriff y se incluyó en cada capítulo de 20 minutos un espacio musical de cinco minutos. La afrocubana Yasnaya Guiber, luego de investigar la cultura garífuna y sobre el VIH, escribió los guiones con un contenido educativo que lleva implícito, en cada capítulo, un mensaje relacionado a la prevención, fidelidad y abstinencia sexual. “Los ancestros no mueren” contiene 90 capítulos y “A orillas del mar”; ambas se transmitieron a través de siete radioemisoras con mayor rating en las comunidades antes mencionadas.