La Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH asume el compromiso de encomendar a la Relatoría de Derechos de las Mujeres que conozca e investigue la problemática de las obreras que laboran en las maquilas, asimismo de exhortar a los cancilleres de Honduras y Nicaragua para la ratificación del Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC) de El Salvador.
Una delegación integrada por el Centro de Derechos de Mujeres CDM, la Colectiva de Mujeres Hondureñas, CODEMUH de Honduras, Concertación por un Empleo Digno en la Maquila (CEDM), Grupo de Monitoreo Independiente de El Salvador (GMIES), el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH) el Centro para la Acción Legal en Derechos Humanos (CALDH) y el Centro para la Justicia y el Derecho Internacional CEJIL acudieron ante La Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH en una visita a su sede en Washington, Estados Unidos, el pasado mes de julio.
“Solicitamos a esta Ilustre Comisión que en su ya tradicional comunicado de fin de audiencias incluya su preocupación por la situación aquí expuesta y que expresamente llame a los Estados centroamericanos a la adopción de todas aquellas medidas necesarias para prevenir las violaciones a las que estas (mujeres de la maquila) están expuestas y para garantizar el pleno goce de derechos legalmente tutelados” indicaron en el informe entregado a la CIDH.
Una larga espera
Es primera vez en 20 años de la instalación de la industria maquiladora en Honduras,
que la CIDH, instancia de la Organización de Estados Americanos, OEA, concede una audiencia para exponer las violaciones a los derechos humanos y laborales que enfrentan obreras y obreros de la maquila.
Yadira Minero, coordinadora del Programa Mujer y Maquila del Centro de Derechos de Mujeres relató que casi dos años hubo que esperar esta oportunidad solicitada a través de El Centro para la Justicia y el Derecho Internacional, CEJIL.
El Informe de la delegación hondureña plasmó la situación de las obreras de la maquila y la frágil tutela y vigilancia estatal, y como el Estado hondureño ha implementado una política de desamparo y casi de desaparecimiento de la estructura del Ministerio del Trabajo en regiones del país de alta concentración laboral, condición que agrava los conflictos en el empleo.
Se expuso el problema de la inestabilidad en la maquila, la práctica de los cierres y suspensiones “En los últimos once años alrededor de 142 empresas dejaron a 74,300 personas sin empleo, en su mayoría mujeres.
Salario Diferenciado
Destacaron su rechazo a la reciente aprobación del Acuerdo Ejecutivo de Salario Diferenciado por regiones, que permite pagar menos en zonas de mayor pobreza en Honduras por término de 10 años, lo que califican de altamente discriminatorio. “El Estado hondureño no puede mediante decreto obligar a la población a renunciar a sus derechos humanos elementales y omitir los compromisos internacionales adquiridos. Al contrario, se debería promover acciones positivas de acceso público a la educación, salud, vivienda y a optar a un mejor salario que les permita mejorar la calidad de vida”.
Se denunció como en la maquila se violenta las garantías constitucionales como el derecho de petición, organización y la represión que se ejerce ante los reclamos como despidos y la aparición de listas negras.
El Centro de Derechos de Mujeres CDM evidencia a través de una investigación presentada en febrero del 2007 los testimonios de las obreras, las prácticas empresariales de discriminación, intimidación y/o represión laboral que se ejercen hacia las obreras de las maquilas cuando reclaman, exigen o tratan de organizarse para mejorar sus condiciones de trabajo.
Se pretende que la CIDH ponga especial atención igualmente al problema de salud de las obreras de las maquilas, al derecho a una atención médica adecuada y oportuna, a condiciones de trabajo seguras.