Colombia tiene que promover la competencia en el mercado de la telefonía móvil y permitir que nuevos operadores ingresen al mercado, tanto al de voz como al de la prestación del servicio de internet de alta velocidad o 4G, señaló el senador Jorge Enrique Robledo en el debate citado con el senador Juan Mario Laserna sobre la subasta del espacio radioeléctrico.
Están demostrados los efectos negativos del monopolio de Claro-Comcel en Colombia, puntualizó Robledo. Y preguntó: “¿La subasta de 4G va a fortalecer el monopolio actual de Claro-Comcel o va a debilitarlo?” Dijo que al monopolio no solo se lo combate mediante una regulación estricta, sino también creándole competencia, en aras de mejorar el servicio, rebajar las tarifas y estimular el progreso tecnológico. De lo contrario, añadió, el país terminaría peor que México, donde el monopolio de América Móvil, dueña de Claro y propiedad de Carlos Slim, el hombre más rico del planeta, le causa pérdidas en bienestar a la economía mexicana por US$25 mil millones al año. En Colombia el monopolio de Claro, según cálculos de Fedesarrollo, ya les ha provocado pérdidas de bienestar a los colombianos por US$2.565 millones.
La Constitución, subrayó el senador del Polo, obliga al Estado a dictar normas para evitar que se monopolice el espacio radioeléctrico, un bien público de propiedad de la nación. Sí es factible entonces que se excluya la participación de Claro en la subasta de 4G, tecnología que permitirá aumentar la capacidad para transmitir información a través de redes inalámbricas y unir en una sola, a velocidades superiores, el internet, la voz y la TV y que modificará radicalmente el panorama de las telecomunicaciones.
Al culminar su intervención como citante, Robledo les propuso a las distintas bancadas diseñar una ley antimonopolio que imponga una cuota máxima del mercado y evite que los abusos de un operador dominante se sigan repitiendo. Sería una muy buena noticia para todos los colombianos.
25 de septiembre del 2012