“El porvenir de un hijo es siempre la obra de su madre”, es una frase conocida que quizás Diana Becerra no conoció, pero que puso en práctica en los años que laboró en la Secretaría de Relaciones Exteriores, al destinar una parte de su salario, al pago de las cuotas del seguro de vida que legaría a sus hijas en caso de fallecer.
Diana trabajó como perito mercantil y durante sus años laborables perteneció al Colegio de Peritos Mercantiles, asociación que tiene como política asegurar a sus agremiados en el Aseguradora Hondureña Mundial –AHM-.
El 28 de noviembre del año 2008, luego de una lucha tenaz contra el cáncer, Diana murió, dejando a sus pequeñas Keren y Andrea, en aquel entonces de diez y seis años respectivamente, al cuidado y tutoría de su madre, por su condición de madre soltera.
Aseguradora Hondureña se niega a indemnizar a Keren y Andrea
Luego de la muerte de Diana, sus dos pequeñas hijas fueron representadas por su tutora ante las oficinas de la Aseguradora Hondureña con la intención de reclamar la indemnización que les correspondía, de acuerdo al seguro de vida que Diana pagó durante años, como afiliada al Colegio de Peritos Mercantiles.
Pero la sorpresa de la tutora de las niñas fue grande. “Esta compañía de seguro se niega a pagar los 75 mil lempiras que por seguro de vida le corresponde a las niñas, pese a la resolución que emitió la Comisión Nacional de Bancos y Seguros –CNBS, quien está a cargo del caso de Keren y Andrea.
La resolución número 1879/25(11)2010, emitida por la CNBS obliga a “que la ASEGURADORA HONDUREÑA MUNDIAL proceda a indemnizar a los beneficiarios de Diana Becerra”.
La abogada de la ASJ explicó que desde la muerte de Diana han transcurrido más de dos años de procesos legales, para logar que la Asegurador Hondureña le entregue la indemnización que le pertenece a las pequeñas.
Para la abogada de la ASJ es importante hacer notar que en el Colegio de Peritos Mercantiles, “aseguran a sus afiliados en una sociedad mercantil que abiertamente ha decidido no respetar la resolución en el caso de Keren y Andrea, como si están por encima de la ley, dijo.
“La comisión Nacional de Bancos y seguros debe regular este proceder pero que sea la población que rechace los servicios de la Aseguradora Hondureña, porque al final es dinero perdido, estas niñas están en el desamparo esperando esa cantidad pequeña, pero grande para ellas para mejorar su nivel de vida”, agregó la profesional del derecho.
Contrario a las acciones que la Aseguradora Hondureña Mundial está ejecutando en contra de las dos menores que quedaron al cuidado de su abuela, quien esperaba contar con lo poco que su hija había ahorrado durante años, en su página web la aseguradora proclama ser una empresa que satisface “las necesidades de seguros de sus clientes con Integridad, Transparencia, Excelencia e innovación”.
Según la información del portal de internet, la Aseguradora Mundial, S.A. fue fundada en 1967 por un grupo de inversionistas panameños y extranjeros, “movidos por el interés de brindar alternativas a las necesidades de protección y seguridad tanto de personas individuales como de empresas”.
Destacan que la Aseguradora Mundial recientemente fue reafirmada con la calificación A- (excelente), reconocimiento otorgado por, A.M. Best Co. la mayor autoridad del mundo en calificación de seguros y fuente de información.
Además indican que la junta directiva está integrada por: Manuel José Paredes Lefevre, José María Agurcia Fasquelle, Carlos M. Ramírez(Blázquez, Rodrigo A. Díaz, Johnny Kafati, Fernando Lewis Navarro, Jaime Jean)Francois, Salomón Kafati y Carlos A. Pineda.
“No permitamos que irrespetan la ley, que hagan negocios con nosotros, con el gobierno y que al final perjudica el pueblo. Si ellos no respetan el hambre, la necesidad de unas niñas, no respetaran la necesidad de nadie”, expresó finalmente la apoderada legal del caso de Keren y Andrea.