Después de permanecer completamente sedado por más de cuatro días, tras sufrir un atentado contra su vida la tarde del lunes 1 de septiembre, Santos salió de un estado crítico de su salud. Ahora se recupera con las dificultades que conlleva sobrevivir sin algunos de los órganos vitales. Informes médicos reportan que perdió un riñón y la vesícula, mientras que el intestino grueso y delgado, la vejiga y el hígado están afectados, más uno de sus brazos, que le sirvió para proteger la vida de su hijo que lo acompañaba en el momento del atentado.
Luis Javier, quien hoy es considerado como un símbolo de la lucha contra la corrupción en Honduras, despertó el sábado 6 de septiembre para dar escuetas palabras a sus amigos a quienes manifiestó que la lucha contra la corrupción debe continuar.
Fortaleza espiritual
En la mañana del martes 9 de septiembre los religiosos Ismael Moreno, conocido popularmente como Padre Melo, y el pastor Evelio Reyes visitaron a Luís Javier y confirmaron la fortaleza espiritual con que se recupera.
“Es cierto que Santos esta golpeado en todo su cuerpo, pero su fortaleza espiritual y los deseos de continuar viviendo para compartir su vida con este pueblo es mucho más grandes que cuando le infirieron las balas”, dijo Melo.
10 de septiembre 2008