De los 128 diputados y diputadas que integran la única cámara legislativa en Honduras, Ciento once diputados votaron ratificando el golpe de Estado del 28 de junio, catorce se pronunciaron porque se restituyera a Mel Zelaya, dos estuvieron ausentes y al diputado Tomás Andino no se le permitió el uso de la palabra y también se le tomo como inasistente.
Los diputados a favor del golpe de Estado no rebatieron los argumentos de quienes expusieron que el 28 de junio se rompió el orden constitucional al destituir ilegalmente a Manuel Zelaya y nombrar a Roberto Micheletti en la presidencia de la República.
Sobre la decisión del CN de no aceptar su restitución, Zelaya manifestó días atrás que no aceptaba ninguna decisión del acuerdo Tegucigalpa-San José, el cual dio por fracasado en una carta enviada al Presidente de los Estados Unidos, porque era una burda maniobra que nada más buscaba ganar apoyo internacional para que reconocieran las elecciones hondureñas del 29 de noviembre.
En el razonamiento del voto que no se le permitió presentar al diputado Tomás Andino manifiesta que vota en contra de la moción de ratificar el decreto del golpe de Estado porque el Congreso Nacional no tiene facultades para destituir al presidente y al hacerlo se cometió abuso de autoridad.
“Hoy no se trata de estar a favor o en contra de una persona, se trata de impedir la destrucción del Estado de Derecho en Honduras”, dijo.
Recordó que la renuncia que se presentó el 28 de junio era falsa y que si acaso fueran ciertas las supuestas denuncias de delitos el Presidente Zelaya tiene derecho a ser oído y vencido en juicio, y además a ser tratado con el Debido Proceso del cual el derecho de Defensa.
Andino criticó que el CN actúa como tribunal condenando a Zelaya sin que en los Juzgados ni siquiera se hubiera iniciado el juicio
Además que se violó el Artículo 102 constitucional con la expatriación forzosa que hicieron los militares contra el Presidente, lo cual no puede hacerse a ningún ciudadano.
Según el diputado, ratificar el golpe de Estado establece un terrible precedente por el cual ningún Presidente, ni diputado, ni alcalde, ni los que acompañan esa moción, estarían a salvo de que mañana los militares los sacarán amarrados en pijama y los harán sufrir del destierro.
Señaló que detrás del Golpe de Estado “están los mezquinos intereses de la oligarquía, de la clase empresarial corrupta y parasitaria, que quiere poner freno al pueblo hondureño en su lucha por un mejor nivel de vida” y que con la decisión “este Congreso ratificaría ser comparsa de la estrategia norteamericana para frenar la conquista por una sociedad justa a los pueblos latinoamericanos”.
Los datos del tribunal supremo Electoral han resultado una gran mentira. En su afán de lograr el reconocimiento del mundo a las elecciones del 29 de noviembre se adelantaron a asegurar que éstas fueron las votaciones mas concurridas en la historia atreviéndose a informar que participó el 75 por ciento de los habilitados para votar.
La realidad es que las urnas estuvieron vacías. Los reportes en los municipios dan cuenta de un abstencionismo electoral entre un 65 a un 75 por ciento y de los que participaron se observa un incremento considerable de votos nulos y blancos.
La gran prensa nacional comprometida completamente con el golpe de Estado, desde primeras horas de la mañana del día de las elecciones comenzaron a pregonar que multitudes estaban votando, aun cuando era evidente la soledad en los centros de votación.
Los magistrados del TSE hicieron su parte al inflar aproximadamente en un 40 por ciento los resultados globales, pero la mentira se descubre cuando se revisan los resultados en cada una de las 15 mil mesas electorales o en los conteos en los 298 municipios del país.
Los resultados de las cuestionadas elecciones le dan una rotunda ventaja al ultra conservador Partido Nacional y su candidato presidencial Porfirio Lobo Sosa, mas conocido como Pepe Lobo, porque gran parte de los seguidores del gobernante partido Liberal se encuentran en la Resistencia y no fueron a votar.
En el Congreso Nacional el partido de lobo podría tener mayoría absoluta al arrasar en 16 de los 18 departamentos y lo mismo sucede en los gobiernos municipales.
El presidente Manuel Zelaya ha dicho que no reconoce los resultados electorales a los cuales calificó como una gran farsa y llamó a los gobiernos a que no reconozcan a las autoridades resultantes de los comicios.
El Frente Nacional de Resistencia por su parte, ha continuado con sus acciones de protesta y el mismo dia de las elecciones fueron brutalmente reprimidos durante una protesta pacífica en San Pedro Sula, la segunda ciudad en importancia del país. Muchas personas resultaron afectadas por los gases lacrimógenos, golpes de los policías, incluyendo un periodista español y un ciudadano costarricense delegado para observar la situación de los derechos humanos por parte de la organización Servicios de Paz y Justicia que dirige el premio nobel de la paz Adolfo Pérez Esquivel. Fueron detenidas cuarenta y ocho personas y liberadas horas después por las acciones de los abogados.
Al siguiente dia de las elecciones una caravana de carros recorrió importantes calles de la capital celebrando que por lo menos no votó un 65 por ciento del electorado, lo cual consideran fue un triunfo de la resistencia la cual llamó a no participar en el proceso electoral.
La actividad llegó hasta la calle de acceso a la embajada de Brasil donde se encuentra recluido el presidente Zelaya desde el 21 de septiembre.
Ahí los manifestantes gritaban ¡Liberen a Mel! ante la valla de militares y policías que desde hace una semana fue reforzada y por las noches amplían la cantidad de calles por donde no se puede circular.
Esta semana hubo protestas frente al Congreso Nacional, actos culturales en San Pedro Sula, una misa con cinco sacerdotes en El Progreso. Hay foros en diferentes lugares, un taller nacional para discutir sobre la constituyente y en Santa Barbara una importante jornada cultural denominada Paseo Real de las Chimeneas gigantes con musica, poesía, teatro, exposiciones de fotografía y las figuras gigantes hechas de papel que queman en un acto especial.
Aunque los defensores del golpe aseguran que con las elecciones y la decisión del Congreso Nacional se pone punto final a la crisis política, evidentemente la Resistencia no piensa igual y siguen en acción, se prepara para largas jornadas contra el gobierno ilegítimo y propone como única salida la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente que restituya el orden constitucional.