Olga Meléndez, empleada de la maquila AFL, denunció en Vida Laboral, haber sido despedida de su trabajo, sin el pago correspondiente de sus derechos de maternidad.
Con once meses de laborar para la empresa y dos de embarazo, la operaría fue despedida de su empleo, en diciembre del año pasado, junto a veinte compañeras más, por rebaja de personal. A pesar de que la obrera presentó registro del Seguro Social por su estado de embarazo, la jera de Recursos Humanos, Yolany Contreras y el gerente de la empresa, un mexicano de apellido Vaquera, no hicieron caso a lo que estipula la ley y de igual manera fue retirada, sin el reconocimiento de sus derechos.
La empresa AFL, se dedica a la elaboración de arneses para vehículos marca Ford y los empleados laboran en turnos rotativos, durante nueve horas diarias desde las 7 de la mañana hasta las cuatro de la tarde, por un salario de tres mil lempiras mensuales, dijo la afectada. La denuncia de la obrera también fue conocida por el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos y el Ministerio del trabajo de El Progreso.