“Las elecciones no tienen legitimidad, no veo porque Brasil debe reconocer un proceso que no fue legítimo”, declaró el canciller Celso Amorim, publicó hoy el diario Folha de Sao Paulo.
El diario Estado de Sao Paulo, por su parte, reportó que Amorim volvió a pronunciarse sobre Honduras luego de haber evitado hacer declaraciones desde el fin de semana, cuando dijo estar más interesado en el partido entre Real Madrid y Barcelona, que en los comicios hondureños.
Brasil suspendió relaciones con Honduras el 28 de junio, día del golpe que depuso al presidente Manuel Zelaya e implantó un gobierno interino a cargo de Roberto Micheletti.
El gobierno del presidente Luiz Lula da Silva había exigido que Zelaya sea restituido antes de los comicios del domingo, que dieron la victoria a Porfirio Lobo.