La carencia de políticas destinadas a favorecer al sector rural del país, ha provocado que después de treinta años de poseer 58 manzanas de tierra, los campesinos afiliados a la Cooperativa La Morazán todavía no cuenten con sus respectivos títulos de propiedad y disputan el predio con el empresario maquilador Nicolas Malouf.
La Cooperativa Morazán afiliada a la Central Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC), se ubica en la comunidad Quebrada de Yoro en la carretera que de El Progreso conduce a Tela, contiguo a Zip El Porvenir.
En 1975 el Instituto Nacional Agrario (INA), otorgó a La Morazán una garantía de ocupación de la tierra. Los campesinos cultivaron granos básicos, yuca, cítricos y con el apoyo de la cooperación alemana construyeron un proyecto de viviendas.
Conflicto
Dieciocho años después (en 1993), la familia Malouf a través de la empresa Inversiones Pirámide, acusó a los campesinos de usurpación, las tierras fueron militarizadas y varios campesinos fueron encarcelados.
Uranta el conflicto ese año fue asesinado el campesino Cleofes Colindres, a quien enterraron en un pozo al interior de las tierras de la cooperativa. El delito se mantiene sin castigo.
La CNTC realizó acciones de presión y logró la desmilitarización de la tierra, los campesinos volvieron a ocuparla y el INA en 1994 ratificó la garantía de ocupación, pero con un defecto: la carta de garantía carece de la firma del funcionario responsable del INA, razón por la cual fue anulada la resolución, a petición del apoderado legal de la familia Malouf.
Destrucción
El 19 de enero de 2001, se produjo el cuarto y último desalojo en contra de los campesinos. La policía nacional y guardas de seguridad, acompañados de maquinaria pesada llegaron a la cooperativa y destruyeron las viviendas y cultivos que habían quedado en pie después de desalojos anteriores.
Nadie pagó los daños y por gestiones de los campesinos, el INA reabrió el expediente para corregir las fallas en el otorgamiento de las garantías, sin embargo, el proceso de titulación de la tierra ha encontrado diversos obstáculos legales.
Financiera fantasma
Según documentos en poder de la CNTC, se conoció que la tierra fue hipotecada por la empresa Pirámide en la supuesta financiera Inversiones América, el trámite de expropiación y titulación pasa forzosamente por la liberación de la hipoteca y hasta ahora nadie encuentra las oficinas de la financiera. Los números telefónicos que aparecen en los documentos responden a familias particulares que desconocen el asunto.
Según el Banco Central de Honduras, la financiera Inversiones América estuvo registrada, pero a partir de 1992 ésta aparece inactiva.
Hoy los campesinos están en posesión de la tierra, pero la amenaza sigue, sobre todo por la cercanía a la ciudad de El Progreso y la ubicación de las maquilas, incluso algunos pobladores han pretendido el terreno.
Las acciones judiciales en contra de los campesinos disminuyeron y casi se abandonaron porque Nicolás Malouf se encuentra prófugo de la justicia, acusado de estafa por otro empresario a quien le vendió una propiedad que ya no era suya.