El hecho nos fue reportado en la zona el mismo día en horas de la tarde, sin embargo, en vista de que la víctima fue trasladada a un Hospital en la Ciudad de Tocoa y luego trasladado en condiciones delicadas al Hospital D·antoni de la Ceiba Atlántida, fue imposible de momento obtener mayores datos por el feriado de la época, de fin e inicio de año. Hemos sido informados que su salud ya es estable.
De todas estas acciones de provocación, persecución y de hostigamiento da cuenta y está al tanto el Comandante del XV Batallón de Infantería apostado en la Ciudad de Trujillo, quien es el responsable de las acciones militares que se ejecutan en el Departamento de Colón y no desconoce de las ejecutorias de la seguridad privada que vigila tierras, propiedades e instalaciones en la zona.
Las autoridades de la Fiscalía no se hicieron presentes a levantar un reporte del incidente, por tanto consideramos al momento de hacer esta denuncia desconocen lo sucedido y aquí denunciado.
Tegucigalpa, M.D.C., Durante los días previos a la Navidad y de año nuevo, hemos observado la fuerte presencia Policial, Militar y Paramilitar en el Valle del Aguán, principalmente en la Ciudad de Tocoa y Trujillo, la Comunidad Guadalupe Carney, Comunidades como la Brea, Marañones, Orica, Paso Aguán, Panamá y Tumbador, a lo largo y ancho y al interior de los Campos palmeros. Ha sido notoria la presencia subterfugia de contingentes de las fuerzas Policiales, Militares y paramilitares, que se mantienen insitu desde este largo feriado de fin de año, al resguardo de los intereses de los Terratenientes, El Árabe, Miguel Facussè Barjum, El Salvadoreño Reynaldo Canales y el nicaraguense René Morales.
En las Estaciones Policiales de Tocoa, se observan las dos enormes tanquetas de gas liquido, que permanecen en servicio listas para atacar al frente y a la retaguardia de las fuerzas antimotines y rompe huelgas en la zona, las cuales prestan su violento accionar en las movilizaciones de Maestros, pobladores, Estudiantes, gremios profesionales, obreros, el Frente Nacional de Resistencia Popular y ahora en los campos palmeros, para reprimir ferozmente y dispersar en primer orden las protestas y reclamos de la población hondureña.
La Comunidad Guadalupe Carney, a escasos 16 Kilómetros de la Ciudad de Trujillo, se mantiene cercada desde inicios del mes de Diciembre/10 con un contingente Militar apostado en una carpa de combate en el propio centro de la población, formando un triangulo entre la Escuela de Educación Primaria y la Iglesia Católica.
Para los próximos días al iniciarse el año 2011, las estrategias de represión tenderán a recrudecer con las acciones de nuevas tomas de las tierras, que serán reclamadas nuevamente por los grupos campesinos, ante el empecinamiento de los Terratenientes de apropiarse con razonamientos ilegítimos, sin certificación de su propiedad, sin demostrar su legitimidad, en colusión con Fiscales y Jueces del Departamento de Colón, que ordenan constantemente los desalojos según lo expresado por algunos de los Apoderados legales y Profesionales del Derecho que defienden a los grupos Campesinos en los Tribunales de la zona, estos mandatos se ejecutan en la mayoría de los casos sin estar en firme las ordenes de desalojo.
Los Terratenientes extranjeros, han arrebatado impunemente a los grupos Campesinos las tierras, aún las cercanas al Litoral Atlántico y hoy se les somete por la fuerza, solo comparable con los tiempos del Medievo cuando los señores feudales eran amos y señores de las bastas extensiones de tierra y sometían al vasallaje a sus súbditos, disponían de sus vidas a su antojo, con sus ejércitos privados se cobraban justicia y el Señor Feudal era un dignatario que ostentaba un rango nobiliario otorgado por la corona.
Hoy, la cara es la misma, en lugar de colgar en la horca o cruzar con espada a los sentenciados, se les persigue y masacra con sofisticadas y poderosas armas de grueso calibre, con el fino tecnicismo de la guerra de baja intensidad, con el modernismo que da la tecnología de la instrumentalización bélica, con vehículos de lujo, polarizados y de todo terreno, capaces de rodear, cercar, dar persecución y muerte velozmente entre los campos, a individuos buscados en forma individual o colectiva, entre lo agreste, los caminos de herradura y en sus humildes huertos y viviendas, donde se les cerca y sorprende, de acuerdo a la acusación que se pretenda y se les busque,. Estos escuadrones son capaces de hacer justicia con su propia mano, como es el caso de la masacre Tumbador, sin esclarecimiento desde el suceso, con el uso brutal que da la fuerza, apoyados por un poderoso ejército paramilitar privado, la Policía Nacional, Militares nacionales y la Unidad de Sicarios especializados que tienen sitiadas las fincas y las Comunidades de habitantes, tal es el caso de la Comunidad Guadalupe Carney ,se encuentran parapetados y sostienen la estrategia de un clima de terror, tensión, hostigamiento, persecución y muerte en forma permanente sobre los grupos Campesinos del Valle del Aguán..
Mario Díaz. EL LIBERTADOR. 06 de Enero de 2011