La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la CIDH, organismo autónomo de la Organización de Estados Americanos (OEA), expresó su preocupación por el asesinato de Gabriel Fino, quien recibió tres balazos cuando salió de la emisora Estelar, donde conducía un programa, el pasado viernes en San Juan Pueblo, Tela, de departamento de Atlántida.
La CIDH pidió a las autoridades hondureñas que investiguen los hechos y determinen si el asesinato estuvo vinculado con el ejercicio de la actividad periodística, y que juzguen y sancionen debidamente a los autores. Asimismo ha otorgado medidas cautelares a varios periodistas en riesgo y solicitado información sobre denuncias recibidas.
La CIDH recordó que el “asesinato, secuestro, intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación viola los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión”.
La Relatoría Especial condenó ya el pasado día 29 las limitaciones a la libertad de expresión en Honduras, ocurridas después del golpe de Estado y de la ruptura institucional, y urgió al respeto irrestricto de este derecho fundamental.
06 de julio
Comun-Noticias