“Al que quieren fregar (sacar) dicen que es al presidente de la República”, respondió Lobo después de haber participado en el consejo de secretarios de Estado que se realizó en la ciudad de Guaimaca, a 86 kilómetros al noreste de Tegucigalpa. Sin embargo, niega tener miedo a que puedan defenestrarlo, tal como le pasó a Zelaya en junio de 2009.
“¡Miedo de qué! ¡No hombre, por favor!, más bien se van a enredar conmigo, ni saben. Yo les digo algo: jamás hay que olvidar que a toda acción hay una reacción. Yo les digo, tenemos todo bien seriado, los tengo ubicaditos a todos, se quienes son, tengo toda la información”, señaló.
Desde que reconoció en Madrid, España, que lo ocurrido en el país el año fue un golpe de Estado, Lobo ha sido el blanco de rancios cuestionamientos, en particular de Juan Ramón Martínez, Federico Álvarez, Ramón Custodio, entre otros, quienes piden que de inmediato se debe deponer al mandatario, llegando a extremos de pedir pijamas limpias para sacarlo del país.
Hace unos meses atrás, un grupo de empresarios que financiaron la asonada, advirtieron también al presidente del Poder Legislativo, Juan Orlando Hernández, que por ningún motivo se atrevieran a subirles los impuestos, porque también serian sacados del poder, tal como ocurrió con Zelaya Rosales.
Fuente: Diario El Libertador.
Gabriela Díaz