80 trabajadores de la Universidad Tecnológica Centroamericana (UNITEC), notificaron al Ministerio de Trabajo su integración como organización laboral y un día después recibieron su notificación de despido; una acción ilegal y violatoria de los derechos laborales.
Fue así que se inició una toma, que puso en entredicho ante la opinión pública las condiciones laborales que existen en la UNITEC. La acción de protesta se inicio el pasado 6 de marzo y finalizo el viernes 10, justamente una semana después de formalizar la creación del sindicato y ponerlo ba¬jo la protección del estado.
Nazario Jiménez, coordinador del movimiento y quien trabajaba hace diez años como motorista en la UNITEC, informó que tuvieron varias reuniones con los representantes legales de la institución, demandando el reintegro de las y los trabajadores, pero al mismo tiempo la patronal estaba localizando a la mayor parte de los despedidos para presionarlos y que aceptaran los cheques de las prestaciones e incluso les ofrecían mas dinero.
“A mediados de la semana, casi 50 personas habían recibido las prestaciones y la participación en la toma fue disminuyendo, hasta que prácticamente desintegraron el grupo y ya no pudimos sostener la protesta a pesar de que otros sindicatos y la Central General de Trabajadores nos brindó su apoyo”, explicó Jiménez.
Si las autoridades de la UNITEC no respetan el código de trabajo y sus estudiantes aprenden de este mal ejemplo, estarán muy lejos de alcanzar su visión institucional que para burla de estos trabajadores se resume en: Ser una universidad de excelencia, líder en la formación integral de personas que dejen una huella positiva y duradera en la sociedad
